La licuadora de los primeros 5 años

¿Sabías que en los últimos 10 años el índice de divorcio en México ha aumentado más del 100%? y de esas parejas que se divorciaron el 50% tenía menos de 5 años de casados? (2017)

Estas cifras son horribles, los primeros años de casados deberías ser una etapa para seguir conociéndonos y consolidar nuestro compromiso como pareja y no la época más miserable en nuestras vidas.

Vivimos en un mundo muy acelerado donde no alcanzamos a asimilar tantos cambios que vivimos en nuestra vida y como matrimonio los primeros 5-7 años de casados traen cambios tan radicales donde podemos sentirnos como si entráramos en una licuadora. Gabriel y yo lo experimentamos en nuestra relación.

Por eso aunque no es una regla, les compartimos los siguientes 4 ingredientes que entran al matrimonios en los primeros años; estar conscientes de ellos puede salvar nuestra relación:

  1. Vivir bajo el mismo techo. Empiezas a compartir tu espacio, tu cama, tu tiempo, a ajustar horarios de comida, de salidas, maneras de descansar. Básicamente el “mio” evoluciona al “nuestro”, cambio que no es fácil.
  2. Lidiar con la familia política. La convivencia y compromisos con la familia aumentan. Los detalles a los cuales antes no le dabas importancia porque eran esporádicos ahora se convierten en desesperantes y hasta intolerables: sus intromisiones, comentarios, condiciones y estilo de vida.
  3. Hacer planes del futuro. Muchas veces nuestra pareja tiene planes muy diferente a los nuestros. Planes desde cuándo tener hijos? cuántos hijos tener? si estudiar una maestría? ahorrar? comprar casa? en fin, no quiere decir que algún plan es mejor que otro pero si uno quiere viajar y el otro ahorrar y tener hijos seguro será una de las razones por la que ambos se sienten frustrados en la relación.
  4. Nos estrenamos como papás. Desde el momento que decidimos tener hijos hasta que llegan vivimos situaciones intensas y nuevas para nosotros. Desde poder recibir la noticia de no poder embarazarse hasta situaciones de salud. Y bueno cuando finalmente llegan los hijos, la dinámica de la casa cambia. Nuestro tiempo, dinero y energía deja de enfocarse en nuestra pareja y se centra en nuestros hijos: desde que son bebés y requieren muchos cuidados y atenciones, las desveladas, cambios hormonales, hasta que van creciendo y hay que formarlos y disciplinarlos.

“Son tantas las cosas que vivimos los primeros años de casados que si no estamos bien preparados, capacitados y consientes pueden llevarnos como pareja a vivir en un estrés constante que trae tensión al matrimonio.”

Por esta razón les recomendamos:

  • Tener muchas comunicación
  • Verse como equipo, no rivales
  • Ser empáticos
  • Buscar capacitarse
  • Preguntar y pedir ayuda, verán que no son los primeros ni los únicos que han pasado por esas situaciones y que seguro hay algunos tips prácticos que los pueden ayudar en el proceso.